LA TORMENTA NATE
Apreciados Compañeros,
Nuevamente Nicaragua es sorprendida por otro desastre natural, la Tormenta Nate nos golpeó fuerte, no podemos minimizar los daños, imposible ocultar: los muertos, casas destruidas, infraestructura lastimada y muchos niños, ancianos, personas de escasos recursos económico que perdieron todo y en la peor de las desgracias los agricultores que se les hizo imposible salvar sus cosechas, lo único que podían hacer nuestros hermanos es autoevacuarse, para salvar sus vidas de las inundaciones; pues el fenómeno impacto con vientos máximos sostenidos de 65 kilómetros por hora y rachas superiores, capaces de crear olas peligrosas de más de 3 metros de altura frente al litoral Pacífico de Nicaragua.
En conclusión, a nivel nacional la tormenta nos dejó al país más afectado con refugiados, inundaciones y daños cuantiosos en las infraestructuras, las carreteras y la agricultura.
Desgraciadamente la Finca Integral “Yann Verdina” no fue la excepción y también se vio afectada por los fuertes vientos que azotaron de manera inclemente nuestras plantaciones, los cultivos más maltratado fueron el maíz y el pepino, lo que hicimos fue levantarlos manualmente, utilizamos mecate para que se pudieran sostener y logramos que la mayoría se recuperara. De igual manera los pollitos algunos se enfermaron con infecciones virales, pero también logramos combatir la infección y solamente murieron 4. Consideramos que los daños fueron mínimos… Gracias a Dios!
El país continua en alerta amarilla, pero poco a poco todo vuelve a la normalidad, pero aún las aguas no han bajado de nivel, además estamos en el mes más copioso del invierno que precisamente termina este próximo 31. Tenemos la seguridad de que vamos a salir adelante, el lema de la AI es: fe, valentía y optimismos para enfrentar los retos que se nos presenten en el camino y es siendo positivos que logramos salir adelante!
Me despido de ustedes renovando mis sentimientos de estima y consideración.
Lo que marca más la diferencia entre el hombre y los pájaros es que las aves dejan intacto el paisaje cuando construyen.
Mirna